Hoy hemos vivido un día lleno de diversión y aprendizaje en nuestro campamento. En nuestro octavo día, nos hemos embarcado en una serie de emocionantes actividades que nos han desafiado física y mentalmente, mientras seguimos desarrollando habilidades valiosas.
Por la mañana, un grupo disfrutó de un juego refrescante de lanzamiento de globos de agua. Apuntamos a dianas que eran los propios monitores, lo que nos permitió mejorar nuestra puntería y coordinación motora. Además, esta actividad fomentó la cooperación, ya que trabajamos en equipo para alcanzar nuestras metas.
Mientras tanto, los otros dos equipos se sumergieron en los Juegos Olímpicos. Estos juegos promovieron la competencia sana y el espíritu deportivo, alentándonos a dar lo mejor de nosotros mismos. A través de la participación en diversas disciplinas deportivas, como carreras, lanzamiento de objetos y salto, fortalecimos nuestras habilidades físicas, desarrollamos la resistencia y aprendimos el valor del trabajo en equipo y la superación personal.
Por la tarde, los más pequeños del campamento se dirigieron al pueblo vecino de sorpresa, donde disfrutaron de castillos hinchables con agua y una divertida fiesta de espuma. Esta experiencia lúdica y acuática estimuló su coordinación motora y les permitió disfrutar de un tiempo de esparcimiento mientras se refrescaban. Además, promovió el juego en grupo y el desarrollo de habilidades sociales en un entorno festivo y seguro.
Mientras tanto, los otros dos equipos aprovecharon el tiempo en la piscina y participaron en juegos típicos de campamentos. Estas actividades acuáticas nos permitieron mejorar nuestras habilidades natatorias y disfrutar de momentos de diversión y relajación. A través de los juegos de campamentos, reforzamos nuestra creatividad, resiliencia y trabajo en equipo.
Llegada la noche, todo el campamento se reunió para un emocionante juego ambientado en una lonja, donde teníamos que “pescar” a diferentes peces que resultaron ser nuestros monitores disfrazados. Esta actividad promovió la resolución de problemas, la agudeza visual y la comunicación, mientras disfrutábamos de risas y camaradería.
En resumen, el octavo día en nuestro campamento ha sido emocionante y enriquecedor. Cada actividad ha sido cuidadosamente diseñada para promover el aprendizaje, el desarrollo físico y mental, y el fortalecimiento de nuestras habilidades sociales. Nos despedimos con gratitud por las experiencias.
¡Hasta mañana campamento!
